Chile construye la primera planta termosolar de América Latina
Con la primera planta termosolar de América Latina, Chile pretende poner freno a su crisis energética, que amenaza con elevar aún más los altos costos de la electricidad y que intimida el crecimiento de las Inversiones.
El proyecto funcionará en
base a una torre de 250 metros, la segunda más alta del país, que captará el calor del Sol para generar energía eléctrica. Con esto se evitará la emisión de 643.000 toneladas de CO2 al año.
A diferencia de otros proyectos, este
sistema no utiliza paneles sino que una serie de 10.600 espejos
(heliostatos) de 140 m2 de tamaño que reflejarán la luz y el calor del
Sol a una sola torre, una gran estructura de 250 metros capaz de captar y
retener toda esta energía por cerca de 18 horas.
La diferencia es que la
energía fotovoltaica utiliza la luz para generar electricidad y no es
almacenable, mientras que la termosolar usa el calor del sol para
generar energía y es almacenable. Eso hace que el modelo fotovoltaico
sea intermitente y necesite una fuente de respaldo, cuando la termosolar
funciona de manera autónoma.
En su parte superior, la
torre, que se convertirá en la segunda más alta de Chile, podrá captar
el reflejo de cada uno de estos espejos para almacenarlo en un sistema
de tanques llenos de sales fusionadas.
Un compuesto que posteriormente será utilizado para calentar agua,
generar vapor y con él mover una turbina encargada de generar la energía
eléctrica.
Es decir, realiza un
funcionamiento similar que los sistemas de energías fósiles, pero sin
generar su contaminación asociada. De esta manera, este proyecto es
capaz de evitar la emisión de 643.000 toneladas de CO2 al año y se basa
en una de las mismas ventajas del desierto de Atacama.
Fuente: America Economia
El Ciudadano
Ecoosfera