miércoles, 29 de julio de 2015

EXCAVACIONES EN TORREJÓN DE VELASCO

Un antílope de hace nueve millones de años

  • Descubren los restos de este mamífero en el yacimiento del Cerro de los Batallones

Huesos del antílope y una jirafa gigante encontrados en el...
Huesos del antílope y una jirafa gigante encontrados en el yacimiento. MUNDO

La campaña de excavaciones estival del Cerro de los Batallones, yacimiento paleontológico situado en la localidad de Torrejón de Velasco, ha sido muy productiva. A pesar de su breve duración, 15 días desde el pasado 13 de julio, los paleontólogos del Museo Nacional de Ciencias Naturales, del CSIC, quienes trabajan junto a alumnos de las universidades madrileñas Complutense y Autónoma, acaban de hacer públicos los hallazgos encontrados. El más importante ha sido los restos de un antílope, excavado junto con jirafas de gran tamaño, caballos primitivos, rinocerontes, hienas y jabalíes.
«La importancia de este hallazgo se debe a que después de 25 años excavando se trata del primer cráneo (y resto del esqueleto) de un antílope que ha aparecido; sin duda es algo relevante», explica a este periódico el paleontólogo Jorge Morales, director de la excavación. Se trata de un ejemplar subadulto de una especie muy parecida a ciertas formas de antílopes de gran talla, en la actualidad presentes en la India, concretamente a los nilgos. «Hoy está restringido a la India, pero hace 9 millones de años vivió en España», señala Morales.
La abundancia de los restos encontrados, junto con su buen estado de conservación, confirman la magnitud del yacimiento madrileño, que celebra este año el 25º aniversario desde su descubrimiento. A lo largo de estos años se han obtenido más de 20.000 restos óseos, en gran parte correspondiente a animales carnívoros. Hay representación de anfibios, de reptiles (en especial tortugas terrestres), de diferentes especies de aves (rapaces en su mayoría) así como ejemplares de numerosos grupos de mamíferos (desde roedores a carnívoros) a los que se une el ciervo aparecido hace unos días.
El origen del yacimiento del Cerro de los Batallones se remonta a 1991, cuando las obras de construcción de una cantera para la obtención de sepiolita, sacaron a la luz una notable cantidad de restos fósiles de animales con un excelente estado de conservación. Pertenecientes en gran número a mamíferos, en especial tigres dientes de sable, no faltan una variada representación de herbívoros que poblaron aquella época.
La presencia de tal abundancia de restos ha hecho pensar en la existencia de una trampa natural en la que quedasen atrapados, tal como una zona pantanosa, a la que acudían aquellos predadores a alimentarse de la carroña de los animales que quedaron prisioneros antes que ellos.
Es por esto que en Batallones hayan abundado a lo largo de este cuarto de siglo de excavaciones los cráneos de tigres dientes de sable, hienas y osos. Respecto a estos últimos, se trata igualmente de un hallazgo singular, pues pertenecen a una especie emparentada con el panda gigante, recluido en libertad a las montañas de Sichuan, China.
Considerados los más singulares de la región y uno de los más importantes del mundo, entre los del Mioceno, los yacimientos paleontológicos del Cerro de los Batallones, han sido declarados Bien de Interés Cultural de Madrid.
Dada la importancia de estos descubrimientos en el proyecto que apoya económicamente la Comunidad de Madrid, a lo largo del fin de semana se celebra una jornada de puertas abiertas para que los ciudadanos puedan conocer de primera mano los trabajos realizados y la riqueza de los yacimientos.